Los ojos son, sin duda, los más apresurados en mostrar los signos del paso del tiempo: la piel de los párpados superiores cae y, con ellos, cae la cola de las cejas; las ojeras señalan con más ahínco su presencia y la zona periorbital se va poblando de arrugas, al tiempo que los músculos pierden tono.
Los ojos de mucha gente, sin embargo, fieles a la herencia de sus mayores, presentan problemas de bolsas en los párpados superiores e inferiores aun en plena juventud. Su complejidad muscular y epidérmica y su protagonismo en la riqueza expresiva del rostro determinan la complicación de las técnicas quirúrgicas empleadas.
Intervención
Cuando se trata de eliminar el exceso de piel en el párpado superior, el cirujano realiza una concienzuda exploración para saber con exactitud cuánta piel debe retirar y de dónde debe hacerlo. A continuación, retira la piel sobrante y consigue que la diminuta cicatriz sea invisible aprovechando el pliegue natural del párpado. En el estado del párpado inferior es determinante la cantidad de grasa que actúa como amortiguador del globo ocular. Hay veces que la presencia de hernias hace que la grasa abulte más. Para retirarla, se practica una incisión en el interior del párpado -con lo cual, la cicatriz es invisible- y se retiran estas bolsas. Si estos problemas, que no son consecuencia necesariamente de la edad, se asocian a signos de envejecimiento, hay que completar la operación con técnicas para tensar el canto del ojo, elevar ligeramente las cejas, barrer el contorno con láser para eliminar pequeñas arrugas, o con liftings de la parte superior del rostro.
Anestesia
Local más sedación. Es fundamental que estés tranquila, porque trabajar dentro del párpado exige una enorme meticulosidad.
Duración
Una hora y media más otra hora de observación. Después podrás ir a casa.
Postoperatorio
El objetivo prioritario es evitar infecciones o conjuntivitis.
Por lo demás, los puntos se retiran a los cuatro días y durante una semana más o menos puede haber edemas o pequeños moratones. Las gafas de sol y los cosméticos de camuflaje son imprescindibles.
Precio
Entre 20.000 y 600.000 ptas.
A los seis meses
Es el tiempo necesario para comprobar los resultados definitivos. A los seis meses, la paciente podrá disfrutar ya plenamente de su nueva mirada, más joven, más abierta y más limpia aunque estos signos comienzan a ser perceptibles a partir del segundo mes. El cirujano, por su parte, realiza exhaustivos controles al día siguiente de la intervención, a los cuatro días, a las dos semanas, al mes y a los seis meses. Y un consejo: atención a la hora de elegir cirujano. Todas las intervenciones requieren hacer oídos sordos a los cantos de sirena, pero quizás sea ésta la que requiere la elección más escrupulosa porque los ojos expresan una parte fundamental de lo que somos.
